La «Maldición de los Poltergeist» es un fenómeno que rodea la trilogía de películas «Poltergeist». La serie de eventos inquietantes comenzó con el rodaje de la primera película en 1982. Dominique Dunne, quien interpretó a la hija mayor, Dana, fue estrangulada hasta la muerte por su novio en 1982, pocos meses después del estreno de la película original.
Trágicamente, la joven Heather O’Rourke, quien interpretó a la niña Carol Anne, falleció en 1988 a la edad de 12 años debido a complicaciones durante una cirugía de intestino. Su muerte ocurrió poco antes del estreno de «Poltergeist III». El hecho de que dos jóvenes actrices de la película original murieran prematuramente contribuyó a la percepción de una maldición.
Además, el actor Julian Beck, quien interpretó al malévolo reverendo Kane en «Poltergeist II: The Other Side», murió de cáncer estomacal poco después de completar su trabajo en la película. Will Sampson, otro actor de «Poltergeist II», también falleció después de someterse a un trasplante de corazón.